CARMEN GLORIA LARENAS
La Gala de Estrellas que presenta el Teatro Municipal y el Ballet de Santiago se concentra en la capacidad expresiva de la danza contemporánea más que en el brillo del ballet clásico. "Concierto Barroco", con música de Bach y coreografía de Balanchine, tuvo un buen desempeño general encabezado muy bien por las finas y clásicas Maite Ramírez y María Dolores Salazar, lo que permitió revivir los preceptos esenciales de Balanchine: danza pura, geométrica, abstracta y musical donde la figura masculina es sólo una herramienta para el lucimiento de la bailarina. Luego apareció una de las parejas que se robarían la noche: Bridget Breiner y Friedemann Vogel, primeros bailarines del Ballet de Stuttgart. De físicos dúctiles y flexibles, interpretaron coreografías que nos conectan con lo que hoy pasa con la danza en Europa. Emocionó desde un primer momento...