RAÚL NEIRA B. Dos veces, ya, Jaime Pizarro había presentado su renuncia a la gerencia deportiva de Blanco y Negro (ByN).La primera, en marzo, fue rechazada por Hernán Levy en su condición de máxima autoridad de la sociedad anónima. La segunda llegó a oídos de Carlos Tapia -a los días de haber asumido la testera de ByN- y corrió la misma suerte.La tercera, entonces, fue la vencida. Ayer, uno de los grandes símbolos del Cacique se reunió con la comisión de fútbol (integrada por el citado Tapia, Andrés Vicuña y Eduardo Loyola; Hernán Levy se excusó pues tenía compromisos impostergables) y les contó que no quería seguir en su cargo.Su renuncia, esta vez, tendría carácter de irrevocable. "Es un momento de dolor y lamentamos su partida", dijo Loyola. Tapia, en tanto, era más optimista al sostener que "Pizarro es un activo del club y seguirá prestando servicios", pero...