Pedro Pablo Guerrero Buenos Aires, Montevideo y Santiago fueron las escalas del viaje. Estuvo en Chile apenas cuatro días, pero le alcanzó para intervenir en una mesa de editores independientes, recorrer librerías y afinar detalles con su nuevo distribuidor local: Liberalia. Se mueve rápido Juan Casamayor (1968). En apenas doce años, la editorial que fundó junto a su esposa, Encarnación Molina, se ha convertido en uno de los sellos más importantes del cuento en español, ocupando un nicho que a los grandes grupos no les interesaba.Con una fuerte apuesta por autores latinoamericanos, como Andrés Neuman, Jorge Volpi, Fernando Iwasaki y una narradora chilena residente en España -Isabel Mellado-, la editorial tomó su nombre de un verso de Luis García Montero, gran amigo, coterráneo y profesor de literatura hispanoamericana de Encarnación Molina en la Universidad de Granada.