NADIA CABELLO FARÍAS
A un año de declarar al Paseo Bulnes como Zona Típica, el panorama que ofrece este barrio, en el corazón de la comuna de Santiago, está lejos de ser el de un lugar turístico.
La basura regada en las orillas, el olor pestilente en las esquinas y grupos de indigentes en la calle a toda hora preocupan a los vecinos.
Unos quince mendigos deambulan por las seis cuadras del Paseo Bulnes, en el Barrio Cívico de la capital, donde están el Instituto Nacional de Estadísticas, la Seremi Metropolitana de Salud, las oficinas de Conaf, el Servicio Agrícola Ganadero, entre otros, y que desemboca en el Parque Diego de Almagro.
Vagabundos usan las bancas y el pasto para dormir, se bañan en las piletas, encienden fogatas para cocinar e incluso ven televisión y beben alcohol en plena calle durante las noches.
Vecinos cuentan que éste era un lugar tranquilo hasta que...