Texto, Soledad Salgado S. Producción, Carolina Ovalle N. Fotografías, Carla Pinilla G. Era un sueño. Uno de esos sueños de niña que fue tomando forma y que se concretó hace una década, cuando la casa se puso en venta. Paula Undurraga, artista, que trabajó por años en decoración y producciones, se enamoró de esta vieja construcción de casi un siglo en la esquina de Capellán Abarzúa con A. López de Bello, cuando la visitaba siendo una escolar. "Veníamos con mis amigas a visitar a la tía Carolina -Carolina Díaz- que tenía acá su taller de cerámica Cer. Era muy conocido en el barrio", cuenta. Cuando murió, la casa estuvo abandonada muchos años, hasta que la familia decidió venderla y Paula pensó en rescatarla e instalarse allí con su taller. "Yo trabajaba cerca capacitando a artesanos en el área textil, pero quería algo propio, así que decidí invertir",...