E. G. Guadalajara El festejo de la medalla de bronce que logró el balonmano en Guadalajara se celebró como si se tratara un primer puesto. Y cómo no iba a serlo, si por primera vez en la historia de los Panamericanos una delegación nacional se subió al podio, tras derrotar 27 a 24 a República Dominicana.Los jugadores hicieron una ronda en el centro de la cancha, se abrazaban efusivamente, estaban al borde de las lágrimas... Tenían al público mexicano en el bolsillo, que los alentaba, cual marea roja, con un "ceacheí", y seguían con "A la vi a la va... Chile, Chile... Ra, Ra, Ra" , robándose el espectáculo en el gimnasio del parque San Rafael.Daba la impresión de que todos estaban conscientes de que la historia de un deporte que hasta unos pocos años estuvo marcado por las carencias económicas, los malos manejos directivos y los mediocres resultados, había cambiado.