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Roberto Manosalva González
En abril compré un departamento a la Inmobiliaria Actual Infante, en la calle José Manuel Infante, Ñuñoa, y desde su entrega se han producido irregularidades. Antes ocurrió la rotura de la chapa de la puerta de la loggia, que la empresa repuso después de tres meses. Luego fue la aparición de una mancha de más de dos metros en el living y ahora la inundación de mi bodega en el subterráneo, debido a la rotura de la caldera. El primer problema fue solucionado, aunque tardíamente, y el segundo está en vías de resolverse. Lo importante ahora es la situación de la bodega. Con esto perdí un ventilador, ropa, zapatos y, lo que es peor: tiempo. ¿Quién debe responder? Nadie me asegura que no vaya a repetirse cuando llueva más de la cuenta.
ACLARADO.- Pablo Medina, gerente de la inmobiliaria, señala que los problemas de posventa suceden en...