Texto, Jimena Silva Cubillos. Producción, Carolina Ovalle N. Fotografías, José Luis Rissetti Siendo muy niña, Trinidad Tuñón se percató de que tenía mucha química con la decoración, que le gustaban el diseño y también los objetos antiguos. Que podía disfrutar tanto de hacer manualidades, como yendo a vitrinear al persa Biobío. Reconoce -entre sonrisas y con un dejo de vergüenza- que su papá no tenía para nada buen gusto y que para su mamá la decoración simplemente nunca ha sido un tema. En cambio ella sí, siempre ha sentido afinidad con la estética.-Jamás pude entender por qué mi pieza no era linda si a mí eso me preocupaba tanto. De una u otra forma, sobre todo con géneros, me las ingeniaba para intervenirla y lograr que se viera presentable, más graciosa -asegura. A veces, comenta, se cuestiona por qué estudió Publicidad si lo que en realidad la motiva es...