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"Juan+Camilo+Lorca"

Custodio de la memoria literaria chilena

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Custodio de la memoria literaria chilena Pedro Pablo Guerrero Nació en una casa de la calle Temuco, en el barrio Pila del Ganso, Estación Central abajo, el 13 de septiembre de 1945. Ese día tembló. "Mi madre me decía Temblorcito cuando era chico", recuerda Juan Camilo Lorca con una voz que no puede mantenerse seria por mucho tiempo. Hijo de un suboficial de Ejército y una chilota, en su hogar no había demasiados libros, pero sí revistas. Muchísimas. Y permanecería rodeado de ellas por el resto de la vida.Su hermano mayor lo llevó, cuando joven, a trabajar en el Centro de Investigaciones de Literatura Comparada de la Universidad de Chile, que dirigía Roque Esteban Scarpa, y donde estaban, entre otros, Ariel Dorfman, Armando Uribe y su hermana María de la Luz. "Yo no era del grupo de intelectuales", aclara Juan Camilo, "pero allí conocí al mejor equipo de investigadores de comienzos de los 60. Después de que...
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Rumbo al Premio Nacional

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PEDRO PABLO GUERRERO Es el premio más codiciado de las letras chilenas. Por algo desata polémicas, no solo literarias, sino también políticas. Sobre todo políticas. Son varias las voces -incluso hay un proyecto en la Cámara- que proponen reformar la ley que lo regula, restituir su anualidad, cambiar la composición del jurado, trasladarlo del Ministerio de Educación al Consejo Nacional de la Cultura y varias otras iniciativas que todavía no generan consenso. Pero mientras estas medidas no son más que intenciones, lo único real es que año tras año, incluso sus más acerbos críticos, aceptan postular a él o se dejan postular con más o menos entusiasmo. Significativamente, los precandidatos con mayores probabilidades de ganarlo esta vez son los que se muestran más reacios a hablar de él.ANTONIO SKÁRMETA (1940)Al preguntarle si va a postular nuevamente, el autor de...

Los nombres que corren con fuerza para el Premio Nacional de Literatura

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Constanza Rojas Valdés En el Premio Nacional de Literatura hay mucho de tradición no escrita. Se supone que se alternan los géneros poesía y narrativa, y según eso, este año correspondería a esta última. Se supone, también, que los candidatos deben entregar carpetas con su postulación en un plazo límite, que en esta versión fue el viernes 25 de julio. Pero lo cierto es que la ley no dice nada de esto y, en estricto rigor, el ganador podría salir incluso de un nombre propuesto verbalmente el día de la deliberación.Como sea, actualmente en el Ministerio de Educación se encuentran las carpetas de posibles ganadores, algunos de los cuales suenan como favoritos. Antonio Skármeta (1940) es uno de ellos: "Los escritores y autoras que peinamos canas -o nada, como es mi caso-, y que hoy somos postulados, aspiramos a recibirlo por el inmenso compromiso emocional que nos une con...

Adiós a Gonzalo Rojas, voz fundamental de la poesía chilena

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Adiós a Gonzalo Rojas, voz fundamental de la poesía chilena Constanza Rojas Valdés Sílaba por sílaba descompuso y recompuso el idioma castellano. Sonriente, con boina y suspensores, impulsó una escena poética que no existía antes de él. Y fue poeta hasta sus 93 años. Por eso y mucho más, a Gonzalo Rojas Pizarro, quien falleció ayer luego de un infarto cerebral, hoy se le rinde homenaje como una figura esencial de la historia literaria chilena.Nació en Lebu en 1917, como el séptimo de ocho hermanos. Su padre trabajaba en las minas del carbón de ese lugar, y murió cuando Gonzalo Rojas tenía tres años. A él, cuya ausencia lo marcará profundamente, dedica después el poema "Carbón": "Ahí viene/ embarrado, enrabiado contra la desventura, furioso/ contra la explotación, muerto de hambre".Cerca de los cinco años, en una noche de tormenta, escucha decir "relámpago" a uno de sus hermanos y con ese sonido nace su fascinación por...

Alberto Rojas Jiménez Se Quedó Flotando

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por Cecilia García Huidobro McA. PABLO Neruda le dio lo que él no quiso concederse: el derecho a perdurar, dijo José Santos González Vera. Y tenía razón. Quién no ha leído alguna vez el poema aquel que el poeta luego grabaría incluso en el bar de su casa en Isla Negra: Alberto Rojas Jiménez viene volando. Lo escribió a la distancia, conmovido por la mala nueva sobre su entrañable amigo de la bohemia santiaguina: Yo estaba recién llegado a España cuando recibí la noticia de su muerte. Pocas veces he sentido un dolor tan intenso. Fue en Barcelona. Comencé de inmediato a escribir mi elegía. La publica en El Mercurio sólo meses después de su muerte: ...Vienes volando, solo, solitario, solo entre muertos, para siempre solo, vienes volando sin sombra y sin nombre, vienes volando. Y así parece haberse quedado para siempre, suspendido sobre el territorio de la literatura...
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