VENECIA.- La cineasta estadounidense Sofia Coppola volvió a deslumbrar hoy en la Mostra gracias a esa rara habilidad suya, la languidez cinematográfica, que alcanza su máxima expresión en "Somewhere", cinta interpretada por Stephen Dorff y en la que sigue haciéndose eco del lamento de los que lo tienen todo.Con su habitual gesto de desagrado y hablando para el cuello blanco de una camisa de rayas azules, la pequeña de los Coppola enfoca con muy buen gusto una historia en la que un actor, Johnny Marco, insatisfecho con sus toneladas de fama, busca reencontrarse a través de la relación con su hija, interpretada por Elle Fanning."Me interesa mirar a las personas en sus momentos de transición", explicó la directora de "Perdidos en Tokio" ("Lost in Translation"), "se tienen que aislar del mundo y entrar en contacto con la soledad".A lo que Dorff, manso y a la vez espléndido...