Otelo Barría, osornino, envió una carta a Línea Directa para reclamar por lo que él considera su alejamiento arbitrario de la administración pública. Y, añade, que el hecho estuvo envuelto en circunstancias irregulares.Entre marzo y noviembre de 1973 fue nombrado jefe de Materiales de un liceo industrial de esa ciudad, "cargo que gané por concurso público, y no por tendencias políticas determinadas". Cuenta que el 27 de noviembre, mientras se hallaba fuera del recinto educacional, cumpliendo actividades propias de su puesto, "fui increpado por el inspector general, quien me despidió".Precisa que lo grave del asunto es que "falsificaron mi firma en una supuesta renuncia voluntaria, que es lo que sostiene el Ministerio de Educación hasta el momento".Consultada la respectiva Secretaría de Estado, nos contestó Ximena Galleguillos, jefa Nacional de Atención Ciudadana del 600...