Romina Raglianti Susanne Daniels, jefe de contenidos de YouTube, se quejó en una reciente cumbre de ejecutivos de TV cable y digital sobre lo difícil que es competir hoy para tener producciones de primera línea. "Hacer negocios es frustrante, porque Netflix y Amazon están gastando montones de dinero", explicó. Dio como ejemplo "13 Reasons Why", una serie que, según ella, debió costar no más de $2 millones por episodio. "Pero en Netflix costó US$ 5 millones. No tiene sentido lo que están pagando", esgrimió.Pero esa es la realidad de la actual era dorada en la televisión. Netflix y canales como HBO, que funcionan en base a suscriptores y no publicidad, invierten altas sumas de dinero para quedarse con contenidos exclusivos, que vienen respaldados por cineastas y actores populares, preferentemente de Hollywood. A veces, casi como si fuera un remate, deben pelearse los derechos...