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Radicado en México desde hace décadas, el autor de La virgen de los sicarios y El desbarrancadero viajó a Colombia para someterse a un trasplante de córnea en la prestigiosa Clínica Barraquer de Bogotá. Como se hospedó en el Hotel Tequendama, lugar de alojamiento de la mayor parte de las compañías extranjeras invitadas al XI Festival de Teatro, muchos creyeron que era un amante de las tablas. Sin embargo, confesó que no había asistido a ninguna función porque no le interesaba. De todas formas fue a los ajiacos de su amiga Fanny Mikey y se le vio junto a un grupo de viejos conocidos, entre los que se contaban Juan Camilo Sierra (ex gerente general del Fondo de Cultura Económica en Colombia) y Guillermo Restrepo, director de la Ciudad Teatro, hasta donde el novelista se dejó caer en las noches de Semana Santa.
Vallejo se notaba de buen humor, a gusto en su país, y afirmó...