El Papa Benedicto XVI llamó ayer en su homilía de la Misa del Gallo a poner a Dios por sobre todas las cosas, dejando de lado el egoísmo "individual y colectivo" que, dijo, "nos hace prisioneros de nuestros propios intereses" y "nos pone en contra de la verdad"."Para la mayoría de las personas, las cosas de Dios no son la prioridad", señaló el Pontífice en la Misa del Gallo, que este año se realizó a las 22.00 (hora local), dos horas antes de lo tradicional, para permitir a Benedicto XVI, quien tiene 82 años, descansar lo suficiente para oficiar hoy los ritos de Navidad."En la lista de prioridades, Dios está a menudo al final. Tendemos a pensar que siempre podremos preocuparnos de Él al final", dijo el Papa.Mientras el Papa Benedicto XVI se dirigía al altar de la Basílica de San Pedro un hombre intentó saltarse el cordón de seguridad y tocarlo, pero la escolta se lo...