Eduardo Poblete Viña del Mar Everton no llegó en buen momento a su debut por la Copa Sudamericana. El equipo de Pablo Sánchez arrastraba dos derrotas en casa (ante Universidad Católica e Iquique) y, algo más preocupante, el fondo futbolístico no se parecía en nada al exhibido la temporada anterior.Así y todo, los ruleteros enfrentaron al Caracas con la idea de tomar la iniciativa, apropiarse del trámite y causar daño.Empezaron bien: Marco Bueno y Juan Cuevas tuvieron un par de ocasiones para abrir el marcador, pero la última zaga visitante respondió con eficiencia.De ahí en más, el juego entró en un pozo del que no salió hasta bien entrado el segundo tiempo, cuando el inocente Facundo Moreira metió el brazo (así, al menos, lo interpretó el árbitro Luis Quiroz) en su propia área.Cuevas no falló desde los doce pasos y a 15' del final se estaban dando todas las...