MÓNACO.- Mónaco espera que el enlace entre el príncipe Alberto y su novia, Charlene Wittstock, sea un acontecimiento feliz en la familia reinante, los Grimaldi, cuya historia ha estado marcada por muertes trágicas, escándalos y matrimonios fracasados.Tras la dramática muerte de la princesa Grace -una leyenda de Hollywood que se convirtió en la más bella princesa del siglo XX-, el 14 de septiembre de 1982, las luces de los reflectores han seguido constantemente a sus tres hijos, y los reportes no han aportado alegría al Principado.Por eso los monegascos sueñan que el matrimonio del príncipe Alberto II, segundo hijo del príncipe Rainiero y la princesa Grace, con la ex campeona de natación olímpica sudafricana, sepultará por fin lo que algunos han llamado "la maldición de los Grimaldi". Y es que la saga de la familia Grimaldi -una de las familias reales más longevas- ha...