Cecilia Valdés Urrutia Residentes de Niza, junto a miles de turistas, acababan de disfrutar de un concierto de música gratuito a cargo de la filarmónica de la ciudad y de un espectáculo de fuegos artificiales que se extendió por unos 12 kilómetros, cuando la alegría de las celebraciones por el Día de la toma de la Bastilla, la fiesta nacional de Francia, se convirtió en una pesadilla.Pasadas las 22:00 (hora local, seis horas menos en Chile), la multitud ya iniciaba el regreso a casa por el famoso Paseo de los Ingleses, que había sido cerrado al tránsito de vehículos, cuando un camión blanco embistió a toda velocidad a los peatones por unos dos kilómetros, dejando una fila de cuerpos a su paso.En las calles donde hacía solo minutos se escuchaban los acordes de El Bolero de Ravel, se escuchaban lamentos, llantos y gritos pidiendo a las otras personas que escaparan. Más...