J upp Heynckes tuvo que improvisar ayer ante Celtic. Ante las ausencias de Robert Lewandowski y Thomas Müller, Bayern Munich se presentó en Glasgow sin un centrodelantero neto. El duelo era clave: los bávaros tenían la oportunidad de asegurar, en apenas la 4ª fecha, su pase a los octavos de final de la Liga de Campeones.La solución del DT alemán fue ubicar por las bandas a Arjen Robben y Kingsley Coman, y a James Rodríguez como "falso 9", rol en el que también apoyaba Arturo Vidal: ubicado en el centro del campo, el chileno distribuía el balón, cooperaba en la marca y se las ingenió para inquietar en ofensiva.Su polifuncional esfuerzo, eso sí, le trajo consecuencias. Heynckes lo vio cansado y lo sacó a los 59', algo que no le gustó al chileno. A esas alturas, el Bayern ganaba por 1-0 gracias a un acierto de Coman, que a los 22' aprovechó una mala salida del arquero Craig...