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"Viviana+Villarroel"

Disfraces de fin de año

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Todo un mundo hay detrás de este oficio de hacer disfraces. Los hay muy caros y los hay muy baratos. Algunos altamente sofisticados, otros apenas salvan para la ocasión. Mientras algunos fabrican al por mayor, hay quienes se desviven por conseguir el accesorio perfecto y la tela más resistente. La tienda JIT lleva 35 años dedicados a dar rienda suelta a la imaginación. Cuenta con un stock bastante grande y variado, pero si lo que busca no existe, el único requisito es llevar el dibujo con unos cuatro días de anticipación. Están ubicados en Kennedy 7946 (teléfono 2111838). En los disfraces infantiles también hay una versión ultrasofisticada. Una de las mejores exponentes es la diseñadora de vestuario Anamaría Largo con su Boutique de la Imaginación (Warren Smith 8. Teléfono 2022302). Hadas, damas antiguas, Rapunzel y Blancanieves; animales que nada tienen que envidiarle...

En Talca también corren

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Todo un éxito resultó la Copa Natur de Talca. Más de cuatrocientos atletas de Linares, Parral, Curicó, Rengo y Santiago, además de los locales, se dieron cita en el estadio Fiscal de la ciudad maulina. Se nota que llegaron con muchas ganas de competir, porque batieron 27 récords en la jornada sabatina. Con tantos nuevos registros, varios atletas se inscribieron en la historia del torneo. Entre las damas, cabe destacar a Emma Victoriano (Preciosa Sangre), que batió la marca de los 80 planos infantil y se quedó con el segundo lugar en el largo y el alto; a Javiera Carrasco (Esc. España de Curicó), que hizo el récord en el largo infantil, y a Yudiza Maturana (Rauquén de Curicó), que mandó en la bala. En la categoría selección, Eugenia Chandía (Concepción de Linares) y Viviana Villarroel (Comercial de Linares) se anotaron con los récords de salto largo y bala,...

¡A mí, que me registren!

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por Mili Rodríguez Villouta La Yuyito, una celebridad Un periodista jubilado cuenta que a mediados de los sesenta, uno de sus colegas del diario Última Hora publicó que en un restaurante de la calle Franklin se vendía cocaína. El local estaba ubicado en el preciso corazón del territorio de Mario Silva Leiva el Cabro Carrera y pertenecía a Ruth Galdames, alias la Yuyito. La historia aparece en una crónica del reportero policial Manuel Vega: La mujer consideró la publicación como parte de una campaña y alegó calumnia, pero no llevó la queja a los tribunales. Todo lo contrario, para mejorar su imagen y quedar bien con la prensa, invitó a todos los periodistas policiales de Santiago a una cena en su local. Fue un banquete opíparo y muy bien regado. Cuando los comensales terminaban los postres, la Yuyito pidió la palabra y desde la cabecera de la mesa anunció que su...
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