Paula Rielley Salinas "Nací nieta, por carencia de madre. Arraigo en la misma Colonia y nazco en el riñón de la aristocracia entre las calles Catedral, Congreso y los Tribunales de Justicia. Tuve una infancia mimada, vida fácil, lujosa, abundancia de todo lo material. Clausura monjil en las costumbres. Carencia absoluta de intelectualidad. Religión primitiva, puro sentimiento sin luz espiritual, almas adocenadas, mediocres, pero sanas, puras, nobles y abnegadas". Así comienza su propia descripción Inés Echeverría Bello (1868- 1949), en el libro "Memorias de Iris 1899-1925", publicado en 2005 de manera póstuma por su nieta, Verónica Noguera Larraín. En casi 600 páginas, esta obra recoge su diario íntimo, sus memorias y su correspondencia, en las que Inés repasa su infancia, sus viajes a Europa y Tierra Santa a comienzos del siglo XX y los avatares que vive hasta 1925...