Mario Alejandro Rojas Declarar a Calama como Zona Extrema, que el 5% de las utilidades del cobre quede en el área, una indemnización -en torno a los US$ 500 millones- por la falta de inversiones, y que se compense a la ciudad por haber recibido en 2007 a 15 mil personas y a 7 mil vehículos tras el cierre del campamento de Chuquicamata.Esas son las principales demandas del movimiento ciudadano "¿Qué Sería de Chile sin Calama?" y rebautizado como "Calama Primero", que ayer congregó a más de 20 mil personas, casi el 14% de los habitantes de la comuna, en marchas por las calles y que concluyeron con una caravana de vehículos, un espectáculo y un cacerolazo.Con la consigna "producimos cobre, seguimos pobres", se unieron trabajadores y dirigentes sindicales de Codelco, profesores, estudiantes, comerciantes, gremios del transporte público y de carga y representantes de iglesias.