Carlos Solar Fornazzari Si se confirman las matemáticas de las encuestas y Mariano Rajoy gana las elecciones de mañana en España, el eventual Presidente del Gobierno se verá enfrentado a un dilema de promesas, recursos y prioridades en su política exterior.Enfocarse en Europa en medio del temporal económico resulta sobre todo un deber, en especial cuando su condición de dirigente de derecha le permite tender puentes con sus pares de Alemania, Francia y Reino Unido, quienes públicamente han fustigado las políticas del socialista José Luis Rodríguez Zapatero. Es muy distinto participar en las decisiones, que aceptar las imposiciones, sino que lo diga Grecia e Italia.Por otra parte, está Latinoamérica, donde según el diagnóstico del propio Rajoy, España ha perdido "liderazgo" bajo el actual gobierno.Como botón de muestra, se pueden tomar las visitas Rodríguez Zapatero,...