Carla Gardella Berra Hace un par de años la manicure y pedicure era un lujo que se daban las mujeres para ocasiones especiales, como el día del matrimonio, cumpleaños o aniversario.Hoy, se han contagiado del glamour de las estadounidenses, por lo que este servicio es visto casi como una necesidad. "Es un tema de presentación personal, tal como tener los dientes limpios", explica Senta Wachholtz, dueña de Hands & Company, quien atiende cerca de 300 personas diarias en su local de Plaza Perú.Por eso, tal como en Boston, Nueva York o San Francisco, en Santiago es casi imposible encontrar un mall, strip center o barrio de oficina sin un centro de estética dedicado exclusivamente al servicio de las uñas, ya que éstos se han multiplicado a partir de 2003.Sin embargo, el nacimiento de más de una decena de marcas y la apertura de más sucursales no es la única expansión que ha...