DAN BILEFSKY
The New York Times
GORI, GEORGIA.- Con su bigote característico, el uniforme de mariscal soviético lleno de medallas y la determinación de que hay que asumir como "camarada", el imitador de Stalin, Jamil Ziyadaliev, quizás debería estar sin trabajo en Georgia, un país que todavía está muy débil tras la guerra con Rusia. Sin embargo, Ziyadaliev, de 64 años, padre de dos hijos, quien viste como Stalin incluso en los días feriados y vive en Gori, la ciudad natal del dictador, insiste en que el negocio rara vez ha estado mejor. Lo contratan frecuentemente para bodas, donde baila la música soviética Katyusha de la II Guerra Mundial.
"Parecerse a Stalin es como tener una visa en Georgia", aseguró Ziyadaliev. "Todos los georgianos respetan a Stalin, porque fue un gran líder que creó un gran imperio; y, por supuesto, fue el georgiano más famoso que ha existido",...