ROCÍO MONTES
Desde Madrid
La Iglesia Católica española está convencida: en España se protege más la vida de los linces en peligro de extinción que la de los niños que están por nacer. Es el mensaje que la Conferencia Episcopal ha plasmado en los 30.000 carteles, 1.600 gigantografías y 8 millones de dípticos que desde esta semana se dejan ver hasta en el pueblito más recóndito del país. Y lo ha hecho en medio de la acalorada discusión que sostiene la sociedad española sobre el aborto, en vísperas de que el Gobierno envíe al Parlamento un proyecto que modificará la ley de 1985 y permitirá a las mujeres abortar libremente en las primeras 14 semanas.
La Conferencia Episcopal se opone a la reforma, aunque ello signifique tensar nuevamente las relaciones con el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. No ha sido una convivencia fácil la de los obispos con el PSOE:...