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"Eduardo+Molina+Ventura"
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FRANCISCO VÉJAR Una primera -e inencontrable- edición de la breve obra póstuma de Eduardo Molina Ventura (Santiago, 1913-Lo Gallardo, 1986) fue publicada en 1996 ("Eduardo Molina Ventura. Un poeta mítico", Platero), con textos que José Miguel Ruiz recogió de sus cuadernos. Dos décadas después, Overol da a conocer "Del otro lado del espejo", la edición definitiva de sus poemas, a los que se suman fragmentos de su prosa. Ruiz es, además, el autor del prólogo, en el que entrega valiosos datos sobre la biografía y los días finales del mítico "Chico" Molina. Ahí se lee: "Antes de la muerte, apareció en él toda la soberbia del intelectual (...). 'Yo con los tontos, ni a misa. Ud. Sabe: Soy Monsieur Teste , La b ê tise n'est pas mon fort ', le decía a Roberto Humeres, refiriéndose a la obra de Paul Valéry, libro de cuyo protagonista jamás dejó de hablar". Lector de...
Citados:
Eduardo Molina
,
Eduardo Molina Ventura
,
Efraín Barquero
,
Enrique Castro Cid
,
Enrique Lafourcade
,
Enrique Lihn
,
Hermann Hesse
,
Jorge Edwards
,
José Miguel Ruiz
,
Luis Oyarzún
,
Martín Bormann
,
Martín Cerda
,
Miguel Serrano
,
Paul Valéry
,
Pedro Lastra
,
Raúl Ruiz
,
Roberto Humeres
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Pedro Pablo Guerrero Le dio un ataque de risa. Esta fue la reacción del escritor y académico Marcelo Rioseco cuando en enero de este año, después de asistir a la conferencia anual del MLA (Modern Language Association) en Chicago, el profesor Scott Weintraub, de la University of New Hampshire, le contó que los primeros 17 textos de Poemas del otro (2003) no eran de Juan Luis Martínez, sino de un autor suizo-catalán del mismo nombre. Bueno, casi. El apellido de su homónimo no lleva acento y los poemas traducidos por el chileno desde el libro Le Silence et sa brisure , que Éditions Saint-Germain-des-Prés publicó en París el año 1976, tienen mínimas variantes.Scott Weintraub (Nueva York, 1979) estudia a Martínez desde hace seis años. Mientras revisaba su tesis doctoral y editaba un libro sobre Vicente Huidobro, sostuvo largas conversaciones con el poeta chileno Luis...
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ENRIQUE LAFOURCADE
Distraído, me olvidé de Victor Hugo. 200 años de su nacimiento, hace poco. Fue un escritor que no llegó a estremecerme. Conocí un largo poema, "La oración por todos", en su versión española, con adornos, hecha por Andrés Bello. Confieso, en su oportunidad, no haber avanzado en su enorme novela "Los miserables", que empecé a leer de adolescente y aún no termino. Más tarde, debo admitirlo, disfruté como chino con "Los trabajadores del mar" y "Nuestra Señora de París". De este último libro aún recuerdo a Esmeralda, la gitana recreada en el cine por Maureen O'Hara (¿o fue Paulette Goddard?). Me acerqué curioso a "El arte de ser abuelo" cuando ni siquiera dominaba el arte de ser papá.
Hugo, una institución y una tarea
Duró 83 años. El gran poeta, dramaturgo, libelista enemigo de Napoleón III. El político, el novelista, el pensador.
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ENRIQUE LAFOURCADE
Anteayer fue el día de San Valentín, ese mártir italiano enamorado de Dios. Ignoro si Dios lo torturó con sus bienaventuranzas, hasta llevárselo del mundo allá por el 273 después de Cristo; o fueron los hombres los que con refinados sufrimientos lo consagraron. Aquí esta efeméride se celebra con parrilladas, encebollados y carretes prefestivaleros. Los barrios rojos, azules, negros de Santiago protagonizaron poderosas parrandas. Desnudismo, sexo ("avive el sexo y despierte contemplando...". Variación) sensibilizaron a las nuevas generaciones. Desnudismo, sexo promiscuo, droga, adrenalinazos. ¡Viva el verano! ¡Unos "gays" a los que llaman los bambinos gritaban "viva il vero anno!"
Con el pretexto de Huidobro
Aquí se trata de otro "evento". Huidobro, su traída y llevada memoria, presidió un aquelarre organizado por la productora "Chile Cultura",...
Citados:
Cayo Valerio
,
Colina De Cartagena
,
Diego De La Noche
,
Eduardo Anguita
,
Eduardo Molina Ventura
,
Ema Soto
,
Enrique Gómez
,
Gonzalo Rojas
,
Jorge Cáceres
,
Nicanor Parra
,
Patricia López
,
Teófilo Cid
,
Vicente Huidobro
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Por ENRIQUE LAFOURCADE
EL poeta Eduardo Anguita revive al aproximarse la Pascua de Navidad, cuando se acercan las fiestas de los pesebres, la albahaca, las sandías, el vino con frutas, los niños-angelitos, el misterioso alumbramiento. Anguita es una mezcla festival del espíritu y algo (no mucha) de la carne. Más huesos enamorados que carne. Y todo él, una liturgia, unos hábitos ceremoniales.
Fue cristiano, católico agónico, de rostro trágico, afilado como una cimitarra musulmana y, a la vez, un surrealista de dedicación exclusiva, buscador de la risa, del absurdo mágico, de la poética de todos los ensueños bachelardianos.
Digo fue, pero no hay tal. Es. Lo he visto en los atardeceres circular como un magro fantasma (¡qué tonterías escribo, magro fantasma!) tratando de entrar al Teatro Municipal. Soñé esto, tal vez. Llevaba un violín. Iba vestido de frac. El tío...
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Pertenecientes a la generación plástica del 50 y nacido bajo la impronta del Parque Forestal, donde en algún momento se paseaban figuras como Enrique Lihn, José Donoso, Eduardo Molina Ventura, entre otros, conformaron el Grupo de Estudiantes Plásticos que llegó a formar talleres de creación pictórica donde se invitaba a dialogar con personalidades de la talla de Camilo Mori, Augusto D'Halmar, Eduardo Barrios y Emilio Petorutti. Entre los integrantes de esta agrupación figuraban Gustavo Poblete, Gracia Barrios, José Balmes, Roser Bru, Juan Egenau, Juanita Lecaros, Eduardo Bonatti, Reinaldo Villaseñor, Carmen Silva, entre muchos más. De todo ese grupo - algunos han fallecido y otros han dejado de exponer- sólo se muestran cinco obras. Balmes - describe Francisco Véjar- , por ejemplo, pone en escena un cuadro de la serie "Lota el silencio", fechada en el presente año.
Citados:
Antonia López De Bello
,
Camilo Mori
,
Carmen Silva
,
Eduardo Barrios
,
Eduardo Bonatti
,
Eduardo Molina Ventura
,
Enrique Lihn
,
Gracia Barrios
,
Gustavo Poblete
,
José Balmes
,
José Donoso
,
Juanita Lecaros
,
Reinaldo Villaseñor
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ENRIQUE LAFOURCADE
No hay dudas: el Premio Nacional de Literatura trastorna a los escritores. "Es que somos muy pobres", explican muchos de ellos. Volodia Teitelboim, el nuevo "inmortal", ya había establecido dos razones por las que él creía merecerlo: porque estaba muy pobre y porque estaba muy viejo.
Por otra parte, en el caso de Isabel Allende, se le objetaba el derecho a este Premio "porque estaba muy rica" y porque había tenido un éxito multitudinario de lectores, crítica y venta en muchos idiomas. Doña Isabel era un caso excepcional, nunca habido antes. Ni Neruda ni la Mistral, en tiempos del Nobel.
Entre ambos polos una veintena de aspirantes en los que sin duda alguna predominan los escritores de escasos recursos. Varios, sin recursos, ni siquiera los de amparo.
¿Por qué Volodia?
Me lo han preguntado. Intento verlo en su totalidad. El joven poeta de abundosos...
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Enrique Lafourcade
-¿Debe la fe moverse hacia la soledad? ¿Qué habría dicho hoy Turgueniev, hoy, en que los deslindes entre la ficción y la historia, entre la novela y el documento resultan casi invisibles?
Asustados vemos cómo empieza a envolvernos el nihilismo terrorista. Pronto nos van a impedir la respiración. Dostoievski dio la pelea, exploró fondos. En "E1 idiota" y especialmente en los "Karamazov". Tal vez en ciertos instantes de "Crimen y castigo". Hay allí capítulos que dejan estupefacto. ¿Debe la fe moverse hacia el aislamiento? ¿O necesita integrarse a la Historia, a la multitud? Stavroguin es el hombre oscuro, el sigiloso hipócrita, el político, el incitador. Y, además, está ese Kirilov, el desesperado.
Cada cierto tiempo
Sería útil hoy, en estos años, en estos días, reponer la exhibición de "Los endemoniados", la película basada en la gran novela...
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Enrique Lafourcade
Por años he soñado con la Ciudad de Nunca Jamás, ésa, la silenciosa en sus mil y una noche. ¿Existió en el mundo algo parecido? ¿Musical, al atardecer y cuando comienza el alba? En cada silencio que se aleja, prioridad para los pájaros. Con las primeras luces, estas avecillas nuevas y viejas canta que canta comunicando al sol sus alegrías. Es su manera de descubrir a sus amigos. Van de árboles a bosques y de éstos a los jardines. Expulsan con todas sus fuerzas musicales a los ruiseñores (allí donde existen). Silencian la pajarería del amanecer, si es que ésta aparece hambrienta e intrusa.
Hábitos solemnes
En alguna gigantesca urbe del orbe, como para una fiesta, el sol enciende las mil y una plazas. Mil, una exageración. Las cien plazas, placillas, placitas. En los barrios grises, las sorprendentes presencias florales, con fuentes de aguas y...
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Por Marcelo Somarriva Q.
Todos los días el poeta Efraín Barquero despierta muy temprano en la mañana y sale a caminar. Parte desde su departamento en calle Mosqueto para luego subir por el Parque Forestal, hasta el final, cerca de la estatua de "Ariel y Calibán", de Totila Albert; cruza entonces la Costanera para tomar el bandejón que va junto al río y camina por esa ribera hasta llegar a Pedro de Valdivia Norte. Luego regresa a su casa bajando por el mismo camino. Todas las mañanas antes de que las calles empiecen a rugir.
Efraín Barquero viene de la zona que va desde Curicó al río Maule. Su vida, al menos en sus épocas más importantes, ha estado ligada a los ríos. Nació cerca del río Teno en Piedra Blanca; pasó parte de su infancia y juventud en Constitución en las orillas de la desembocadura del Maule y años más tarde vivió cerca del río Maipo, en Lo Gallardo.