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Luis Felipe Herrera Espaliat
Trabajar veinte días de corrido y descansar diez es un ritmo laboral poco común, pero para Consuelo Salazar (26) tiene sus ventajas. Y es que esos veinte días los pasa navegando por hermosos canales de las regiones de Los Lagos (X) y Aisén (XI).
Esta médico veterinaria trabaja en La Península S.A., empresa naviera que transporta salmones y truchas desde su lugar de cultivo hasta los centros de acopio y faena, donde ella evalúa las condiciones ambientales y sanitarias de estas operaciones.
"Decidí dejar Santiago porque no encontraba ningún trabajo que me gustara, y yo buscaba otra forma de vida, más tranquila, más sana, donde me sintiera más libre", explica Consuelo, quien fue contratada por esta compañía en diciembre pasado.
Vive con nueve personas en un barco, sin internet y con una esquiva señal telefónica. Por eso se contacta con sus...