SAN FRANCISCO, EE.UU.- Estar empleado en Google no es trabajar para una empresa convencional, sino hacerlo en una compañía que, para alcanzar los mayores niveles de innovación, se rige por métodos y por un funcionamiento que poco o nada tienen que ver con el resto, explican cinco jóvenes empleados españoles.Carlos, Ernesto, Pablo, Alonso y Albert son cinco españoles menores de cuarenta años empleados en la que por muchos es considerada la meca de la innovación, la sede central de Google en Mountain View (California), y todos coinciden en una misma afirmación: "trabajar para Google es una cuestión de actitud".Esta frase, de entrada desconcertante, la explica Carlos Emilio Gómez, quien a sus treinta años es miembro del equipo de Estrategia de Negocio Global y Embajador de Google en Motorola: "Necesitamos gente de mentalidad y actitud abiertas. Hemos rechazado a...