Por Antonia Domeyko. Foto Sergio Alfonso López Hamburguesa, tocino ahumado, champiñones, papas hilo, house mayo y salsa honey BBQ. Osobuco desmechado cocinado con cerveza, con rúcula, cebolla, palta y mayonesa Stout, en marraqueta. Costillar de cerdo y pulpa deshilachada, todo marinado en mostaza y soya, con palta a la chilena (medio "acebichada"). Son solo tres de los más de 250 sándwiches que Felipe Sánchez, ingeniero comercial de 28 años, ha probado, criticado y calificado con el emoticón de una nariz de chancho (en una escala del 1 al 5) en su proyecto 365 Sanguchez, que publica en Instagram. Aún le quedan más de 100 por probar para completar el año. Ese es el plan. El 30 de agosto de 2016 fue el día uno. Desde entonces ha recorrido todos los días sangucherías y restaurantes de Santiago y regiones probando cada sándwich que se le pone enfrente. Hoy tiene más de 32...