Coquimbo tiene tradición pirata. Se cree que el corsario inglés sir Francis Drake, el primero en llegar a las costas de la zona en 1579, enterró allí un fabuloso tesoro en la bahía de Guayacán. Le siguieron otros como el también inglés Bartolomé Sharp, que en 1681 incendió y saqueó La Serena, o sus coterráneos Eduard Davis y Juan Strong, que vinieron más tarde.Por eso es que la réplica de un galeón pirata que desde febrero pasado navega en la bahía, e inaugurado formalmente en mayo, se convirtió en atracción inmediata. Con una capacidad de 75 pasajeros, lleva ya 102 "travesías" que se inician mostrando los principales hitos turísticos de Coquimbo y La Serena que se ven desde el mar.Pero la principal atracción está en el viaje de regreso. Allí los piratas "Cuervo" y "El Moro", junto al aprendiz "Favel" recrean la historia de los corsarios que llegaron a la zona,...