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"Harvey+Kurtzman"

Museo Judío de Berlín incorpora cómics donde Superman y Batman luchan contra Hitler

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12/05/10 EMOL - Magazine

Museo Judío de Berlín incorpora cómics donde Superman y Batman luchan contra Hitler BERLÍN.- El Museo Judío de Berlín incorpora color y viñetas a sus colecciones habituales gracias a una exposición centrada en la dimensión judía del arte del cómic que, bajo el título de "Héroes, Freaks y Superrabinos", muestra cómo Superman y Batman, entre otros, intentaron acabar con Hitler.Más de 400 objetos como portadas de revistas, publicaciones, vídeos y paneles muestran en Berlín que, detrás de los más conocidos héroes mundiales, solían situarse dibujantes o editores con orígenes judíos.En ese sentido, no es en balde que Superman, Batman, Daredevil o el Capitán América, entre otros, ocuparon parte de su tiempo en luchar contra las fuerzas del nacionalsocialismo y en darle una lección al mismísimo Hitler.Cómo si de un cómic se tratara, la exposición se divide en seis capítulos, en los que el visitante camina por encima de páginas repletas de...

Mi amigo el asesino

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Guillermo Tupper. Todo partió por una casualidad: la mañana del 22 de julio de 1991, un joven afroamericano alertó a una patrulla policial de un freak que lo había esposado y amenazado con un cuchillo en su casa de West Allis, Wisconsin. Cuando la policía ingresó al departamento, se encontró con un montón de calaveras y trozos de cuerpos humanos en el refrigerador. ¿El responsable? Jeffrey Dahmer, un tipo de apariencia normal y educada que había asesinado a 17 hombres en un período de catorce años. Como si fuese una versión retorcida de Hannibal Lecter, Dahmer no solo mataba a sus víctimas, sino que practicaba necrofilia y canibalismo con ellos. Sus crímenes fueron tan horrorosos, que la policía no dudó en calificarlo como el asesino en serie más sádico desde Jack el Destripador.Ese día, Derf Backderf -pseudónimo del dibujante John Backderf- supo la noticia por un...

El cómic ingresa triunfal al museo

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J.R. Después de más de un siglo, finalmente el cómic comienza a ser reconocido como parte del mundo del arte estadounidense. Mientras en Europa logró ese estatus hace ya 40 años, cuando el Louvre prestó sus muros para exponer viñetas de los principales autores norteamericanos, en Estados Unidos recién ahora dos galerías de Los Ángeles se han atrevido a ingresar el oficio de los dibujantes de historietas al escenario del arte contemporáneo, más allá de lo que ya habían hecho los museos especialmente dedicados al cómic. Si bien existió algo así como un antecedente de esto en la muestra que hizo el MoMA de Nueva York en 1990, la verdad es que todavía en ella el cómic no aparecía valorado por sí mismo, sino como un pariente pobre en función de las obras de grandes artistas como Lichtenstein. Los trabajos, reunidos bajo el título de "Maestros del cómic americano",...

Pide

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Por Álvaro Bisama Esos libros no van a llegar. Olvídate. Las librerías no los van a importar. Los grupos editoriales los consideran un mal negocio. No vas a leer: Monstruos invisibles, de Chuck Palanhiuk; las obras completas de Alberto Laiseca y Fogwill; Sarah, de J.T. Leroy, y La chica del pelo raro, de David Foster Wallace. Las excusas: no hay espacio en el mercado, ni público interesado, ni nadie sabe dónde vender estos libros o qué hacer con ellos. Porque no van a arribar, al igual que Wilcock y Samuel Delany. O Dick, que cae a cuentagotas: aún espero Doctor Bloodmoney y Tiempo de Marte. Así están las cosas. Hay cierta gente que compra en Amazon y salva el día. Otros encargan en ciertas librerías. Los más astutos juegan a subastar en E-Bay. Tengo un amigo que compra todo ahí, desde biografías de cineastas hasta comics de los años 30, pasando por grabados originales...

El Valor de la Ironía

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El próximo año, la revista estadounidense "Mad", disponible en librerías especializadas y además visitable en Internet (www.madmag.com) celebrará medio siglo haciendo humor. Pero no cualquier humor, porque lo que ha distinguido a "Mad" sobre cualquier otra competencia es su permanente ironía para burlarse con y de políticos, artistas y figuras de la cultura popular. Esta revista comenzó a funcionar en un ambiente inhóspito para sus propósitos: los primeros años de la década de los 50, cuando la sociedad estadounidense parecía un duro bloque contra cualquier idea disidente y estaba preocupada de la caza de brujas encabezada por el senador Senador Joseph MacCarthy. En la editorial EC Cómics, una rica alternativa a las monocordes y conservadoras ideas imperantes, el jefe William M. Gaines fue uno de los gestores de esta publicación, que en cierta medida es parte del ADN...
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