Texto, Soledad Salgado S. Producción, Carolina Ovalle N. Fotografías, Gonzalo López V.
Elisa Assler tiene el pelo colorín. "Aunque cada vez menos, el agua de acá es muy mala", comenta convencida. De todos modos es uno de sus sellos, y lo lleva la mayor parte del tiempo semi recogido y siempre largo. Si no fuera porque viste un buzo negro podría ser un personaje de alguno de los cuentos que ha publicado, y cuyas ilustraciones atiborran las paredes de su casa taller. Entre ellas se ve a Tristán, su pequeño hijo, y cuyo embarazo la hizo lanzar el libro homónimo, donde invita a vivir la maternidad a través de la magia y la incertidumbre de cada etapa de cambio. "Detuviste el tiempo y transformaste todo en sentimientos", dice la artista en una de las páginas.
Junto a él y su marido, el arquitecto Joaquín Velasco Rubio, pasa sus días en el Cerro Alegre, y ahora anda más...